De una vez por todas!, pensé. Cuando iba a acabar esa pesadilla, no podíaaguantar mucho más tiempo bajo ese horrible tormento que estaba arruinandopor completo mi persona .Solo deseaba un momento de paz, un segundo en el que pudiera dominar misufrimiento y pensar, ser de nuevo yo.Aquella noche no podía pensar en otra cosa. El calor bañaba de sudor todomi cuerpo y aumentaba mi sensación de ahogo. Todo era asfixiante en aquellahabitación, hasta la tenue luz amarilla de una farola que se colaba através de las cortinas. El sonido de las agujas del reloj me parecíanmelodías de una vieja caja de música.Todavía hoy no se por que lo hice, se que había otras formas de acabar conaquello pero ni siquiera lo intente. Era algo que me estaba convirtiendo enuna persona desquiciada, sin ningún respeto hacia nada que no fuera yomisma. Horas y horas retorciendo de rabia, llorando para acallar mis gritosde dolor, el dolor que me producía pensar en el.El era el culpable de esa situación y solo el debía pagar todo lo queyo estaba pasando.Tuve miedo y dude, puedo decir que dude aunque no sirva como atenuante alterrible acto que cometí, no pediré perdón pues tampoco ahora mearrepiento.Ya estaba convencida y me levante. Mareada por el torbellino depensamientos que había en mi mente comencé a caminar por el pasillo. Mesentía débil, muy débil por el dolor. Creo que he olvidado algunos momentospues no logro recordar de una manera clara todo lo que paso.Ya estaba ante la puerta y veo mi mano como se desliza en el pomo y girasuave sin hacer el mas mínimo ruido. Sentí mucho calor al entrar en aquelcuarto y eso hizo que me decidiera aun mas a hacer lo que tenia pensado,irremediablemente lo iba a hacer.Me arrodille ante la blanca piel y note el suelo frío como el hielo.No se movía nada a mi alrededor. Parecía que ya nada podía evitar elterrible desenlace. El volvía a mi cabeza, daba vueltas y mas vueltascomo riéndose de mi. Entonces lo vi claro, ahora era el momento, ahora onunca. Subí rápidamente la blanca tapadera que le encerraba y derramé todo
lo que llevaba dentro.[......] Después de unos segundos todo había pasado.
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